La energia de Rio siguio vibrando por dentro, tanto, que salieron muchos trabajos en papel, absolutamente cariocas. Muy vegetales, activos, sonoros. Me gustaron los nombres, la forma de decir las cosas, de bendecir, la abundancia de la naturaleza. Bananas pratas, agua de coco, va con deus…. Nada es igual despues de ese viaje.
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